Por Córdoba pasa el río, va a la marisma cantando
Va a la marisma cantando,
por Córdoba pasa el río
Va a la marisma cantando
Por Córdoba pasa el río,
va a la marisma cantando
Va a la marisma cantando
y todo el cariño mío
A sus aguas voy echando
A sus aguas voy echando
pa que lo lleve al Rocío
Que no te puedo cantar,
si estoy delante de ti,
porque si miro a tu altar,
tu niño me hace reír,
y tú me haces llorar.
A la Virgen fui a rezar a decirle to’as mis quejas
A decirle to’as mis quejas,
a la Virgen fui a rezar
A decirle to’as mis quejas,
a la Virgen fui a rezar
A decirle to’as mis quejas
A decirle to’as mis quejas,
mi amargura y mi penar
Pero agarrado a la reja
Pero agarrado a la reja,
la miré y no le dije na.
Que no te puedo cantar,
si estoy delante de ti,
porque si miro a tu altar,
tu niño me hace reír,
y tú me haces llorar.
Si un día por mala suerte, cieguecito me quedara
Cieguecito me quedara,
si un día por mala suerte
Cieguecito me quedara
Si un día por mala suerte,
cieguecito me quedara
Cieguecito me quedara,
mejor querría la muerte
Que estar cerca de tu cara
Que estar cerca de tu cara
y mirar sin poder verte.
Que no te puedo cantar,
si estoy delante de ti,
porque si miro a tu altar,
tu niño me hace reír,
y tú me haces llorar.
Ayer lloraba, Dios mío, cuando escuchaba a mi hijo
Cuando escuchaba a mi hijo,
ayer lloraba Dios mío
Cuando escuchaba a mi hijo
Ayer lloraba, Dios mío,
cuando escuchaba a mi hijo.
Cuando escuchaba a mi hijo,
con siete meses cumpli’os
La primera vez que dijo
La primera vez que dijo,
con voz muy clara: “Rocío”.
Que no te puedo cantar,
si estoy delante de ti,
porque si miro a tu altar,
tu niño me hace reír,
y tú me haces llorar.